La permanente re-definición del estatus del objeto arquitectónico obliga a un replanteamiento de las condiciones sobre las que puede entenderse, proyectarse o construirse un edificio. En los últimos años, la tensión entre los enfoques parciales u holísticos han dispuesto una multitud de escenarios que no siempre ha derivado en la coherencia deseada: mientras que el análisis del objeto arquitectónico como construcción social ha primado la mera exterioridad —olvidando, en ocasiones, oportunas consideraciones disciplinares—, los discursos centrados en el aparato interno de la disciplina no han terminado de cuajar una teoría consistente, incapaces de mediar con una sociedad que demanda accesibilidad por encima de cualquier información especializada. Frente al empate técnico entre autonomía y heteronomía —enganchadas y en equilibrio como esforzados luchadores— se propone un tercer enfoque: la anatomía.

¿En qué se parece un edificio a su proyecto? La asignatura explicará, del croquis a la licencia, la diferentes de discursos y procesos de decisión que sirven para dar forma a un edificio. Lo anecdótico puede ser tan importante como lo sustantivo. Así, durante las diferentes sesiones se propondrá un acercamiento múltiple a un único caso de estudio, desde sus características disciplinares a sus consideraciones técnicas, desde su recepción social a la integración de los agentes técnicos. Un conjunto de clases centradas en los cambios y modificaciones que, en la vida real, conducen la formalización última del edificio.

Cronograma

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